Recomendaciones útiles para hacer un viaje a Menorca

Ya va siendo hora de ir pensando en las vacaciones de verano y hoy os traigo una propuesta muy atractiva, hacer un viaje a Menorca. Los que seguís el blog, ya sabéis que Islas Baleares es mi debilidad, el contraste del azul del mar calmado y cristalino, junto con los tonos marrones de las rocas y los diferentes verdes de la vegetación, constituyen el conjunto perfecto para denominarse un paraíso y no poder dejar de recrearte en el paisaje, suerte que las tenemos en España, muy a nuestro alcance.

El mes de Junio es un mes que me encanta, ya hace calor incluso para bañarte en el mar, aunque no en exceso como para no poder respirar y es por esto que para mi es el mes estrella para viajar. Desde hace algunos años he viajado a las islas de forma repetida, cada año siempre en este mes pero por diversas circunstancias, en una ocasión, hice un viaje a Menorca a finales de Julio, en pleno verano. Hubo ciertas cosas que me sorprendieron y quería contároslas para que la tuviérais en cuenta.

Estas son mis recomendaciones para hacer un viaje a Menorca.

La isla de Menorca es muy tranquila, esto me llamó mucho la atención. Mi idea era pasar una semana en la isla para relajarme y disfrutar de las calas, ese era el plan de cada mañana después de desayunar, salir a ver las calas, disfrutar del baño y comer en algún chiringuito. Por la tarde, tras ducharnos en el alojamiento, nos arreglábamos para salir a dar un paseo y cenar, posteriormente sentarnos en alguna terraza a tomar un cóctel. Solíamos salir por la zona del puerto de Mahón, la más cercana al alojamiento. Nuestra sorpresa fue que tanto los bares donde servían comidas, como aquellos donde en teoría servían copas, cerraban sobre las 00.00 h. Si buscas trasnochar, al menos en esta zona, no va a ser posible.

Hacía muchísima humedad, recuerdo que entré una noche en una de la tiendecitas del puerto de Mahón y el señor que la regentaba me vio tan sofocada que me ofreció una toallita húmeda para refrescarme. Es imprescindible el aire acondicionado en el alojamiento, si alquiláis algún piso o casa, no penséis que como estáis en la costa vais a estar fresquitos, tened cuidado con esto que os puede fastidiar las vacaciones.

En el avión de ida, observé la cantidad de familias con niños pequeños que iban en él. Ya habiéndola conocido, no tengo ninguna duda en que Menorca es la mejor isla para viajar con niños. Es una isla tranquila donde básicamente disfrutaréis del sol y de sus calas, donde los niños se lo pasan en grande, no olvidemos que además esta es una actividad gratuita. Por la tarde, los paseos y cenas en Ciudadela o por el puerto de Mahón pondrán la guinda al pastel, un plan redondo para estar en familia.

La zona de Ciudadela está más animada que la del puerto de Mahón, hay mucho ambiente por la tarde-noche y los bares se llenan. También existen muchas tiendas donde puedes comprar cosas exclusivas, no sólo recuerdos de la isla. En la entrada, di con una pastelería donde probé la mejor coca de sobrasada que había comido nunca, para colmo estaba recién hecha, pero ¡ojo!, era coca y no ensaimada. Pedí un trozo para llevar y más tarde me arrepentí de no haber comprado otro trozo, o la coca entera. Una pena no recordar el nombre, pero como referencia os digo que nada mas adentraros en Ciudadela desde la zona de los barcos, a mano izquierda, cerca de una plaza, tenéis la pastelería.

Lo negativo de viajar a Menorca en pleno verano es que las calas están masificadas, si te acercabas a una cala a eso de las 19.00h, veías cómo al mar se le había formado una película de grasa en la superficie debido al uso de los bronceadores y si además la gente es desconsiderada, no te extrañe encontrar papeles y plásticos en la orilla.

En esta isla están diferenciadas las calas de la zona norte, de arena más oscura, esto hace que el mar no se aprecie tan cristalino, a diferencia de las de la zona sur, donde existe más vegetación, las rocas son más claras y la arena es blanca, puedes por tanto apreciar un paisaje más paradisíaco.