Lisboa es una ciudad que ofrece mucho al turista. Si decides conocerla, no te arrepentirás, de hecho disfrutarás un montón porque cuenta con distintas opciones interesantes. En Internet, encontrarás información sobre qué ver (Elevador de Santa Justa, torre de Belém, Castillo de San Jorge, Monasterio de los Jerónimos, Plaza del Comercio…) de forma repetida, es por ello que en este post he querido ofrecerte 7 planes diferentes para disfrutar de Lisboa en cualquier época del año. Espero que te parezca interesante.
1. Tras despertarte por la mañana en Lisboa, lo ideal es recargar pilas y coger fuerzas para disfrutar a tope de la ciudad. Desayuna en Dear Breakfast (Rua das Gaivotas, 17). Es un lugar agradable, decorado de forma sencilla pero con gusto, en el que te atiende gente jóven muy amablemente. También es un sitio ideal para tomar un brunch, la carta es muy atractiva, la materia prima de buena calidad y la presentación de los platos de 10. Encuentras tostas de aguacate, smoothies, poke bowl, huevos benedict, ensalada de quinoa, pancakes, zumos naturales… una delicia.
2. Existen muchas formas de desplazarte por Lisboa (en tren, metro, autobús, taxi, bus turístico, tuk tuk y tranvía). Tranvías existen varios, cada uno cubre una línea diferente, pero no dejes de subirte en el tranvía 28, es el más antiguo, te traslada a otra época, además te paseará por los barrios más pintorescos. Infórmate aquí de cómo moverte por Lisboa antes de emprender tu viaje.
3. No te voy a recomendar ningún restaurante porque la oferta es extensísima y dependerá de donde estés en cada momento, pero para la comida no puedes dejar de probar el bacalhau à brás (así lo encontrarás en las cartas de los restaurantes). Te sirven unos deliciosos lomos de bacalao hecho a la brasa, servido con tiras de cebolla y patatas cocidas de forma perfecta (tiernas y jugosas) y aparte te traen una salsera con aceite de oliva virgen extra y ajo laminado, todo ello muy caliente que verterás encima del bacalao y las patatas para posteriormente, disfrutar de todo su sabor.
Es muy típico el arroz de marisco, el de pulpo y también el bacalao dorado, pero te recomiendo sin duda el bacalao a la brasa. Aunque si vas a pasar varios días en Lisboa, ¡pruébalos todos!.
4. Aparte de los restaurantes de comida portuguesa, existen en Lisboa muchos restaurantes y bares de comida healthy donde preparan por ejemplo noodles, poke bowl con salmón, etc. Prueba algunos de ellos si te apetece cambiar un poco la alimentación, sobre todo si pasas muchos días en la ciudad.
5. De entre los planes diferentes para disfrutar de Lisboa, igual este no te parece muy original a lo que lees por Internet, pero es que no puedo dejar de contártelo. Ve a merendar a la cafetería-pastelería Pastéis de Belém, fundada en 1837 (Rua de Belém 84-92) y prueba los famosos pastelitos de nata. Están realmente increíbles, hacen tantísimos al día que te los sirven templados, están recién hechos y cuando los pruebas, tu boca siente algo delicado, suave, tu paladar detecta un punto de dulzor perfecto que provoca que tengas que tomar un segundo.
Si ves una larga cola en la entrada no te alarmes, es para comprar pastelitos de nata para llevar. Busca la puerta y entra, existen varios salones con muchísimas mesas, los camareros atienden bien y se producen rotaciones contínuamente, seguro que no tienes que esperar demasiado para coger mesa y comenzar a disfrutar.
Si piensas comprar para llevar, que sea para comértelos muy pronto (al día siguiente vamos), nunca estarán igual de ricos como recién hechos. Es por ello que el mejor pastel de nata de Portugal se come en Belém (Lisboa) en esta pastelería.
Tras la merienda, visita al atardecer la Torre de Belém, la estampa es increíble en este momento del día, muy cerca se encuentra el Monumento a los Descubrimientos.
6. O mundo fantástico da Sardinha portuguesa. La sardina ocupa un lugar especial en el corazón de los portugueses y han querido hacerle un homenaje con la tienda que recibe este nombre situada en Praça Dom Pedro IV 39. Se celebra más de un siglo de historia en torno a este icono de Portugal.
Si duda han sabido montar el negocio pues la tienda llama la atención desde la calle. Dentro de ella encuentras un tiovivo, un sillón para hacerte fotos y las paredes están literalmente forradas de latas de sardinas, así como de pulpo, bacalao, paté de sardina… En las latas, hay escritas fechas, (encuentras fechas desde el 1 Enero 1916 hasta 31 Diciembre 2017) cada década con un color específico, ideal por si quieres regalar una o varias latas de sardinas o comprar alguna con una fecha muy especial para ti y fotografiarla antes de abrirla. Por lo que la tienda, con todo el decorado y la explosión de color con el que cuenta, simula un circo de latas de sardina, porque para Comur, la fábrica de conservas, es el mejor espectáculo del mundo.
El packaging también da que hablar, te la dan metida en un sobre de papel, como si la fueras a enviar por correo, te incluyen un pasaporte con información sobre la fábrica, un mapa donde puedes encontrarlas, aparecen fotos de la tienda, etc. Todo lo colocan en una bolsa de papel muy llamativa. La lata de sardina cuesta 7€.
7. Visita LX FACTORY. (Rua Rodrigues de Faria 103). Era una zona industrial que la han utilizado como mercadillo al aire libre los domingos, también hay tiendas a precios asequibles, bares, restaurantes y zona de ocio donde ofrecen pequeños conciertos. La entrada es gratuita. Un lugar ideal para pasar una mañana o una tarde.
Te recomiendo vayas el domingo, el horario es bastante amplio, abren todos los días de 09.00-02.00h y si hay eventos, cierran a las 04.00h.
No puedes perderte la librería Ler Devagar, merece la pena entrar. Cuenta con cafetería propia y una antigua imprenta situada en el piso superior. Si eres amante de la decoración como me pasa a mí, visita Wish Concept Store.
Fíjate en cada detalle de tu alrededor, seguro que muchas cosas llaman tu atención. Un lugar recomendable si quieres hacer planes diferentes para disfrutar de Lisboa.
CURIOSIDADES. QUÉ DEBES SABER
- No es una ciudad adaptada para niños. Escasean los parques, en la mayoría de los restaurantes no tienen tronas. Lisboa no es una ciudad llana, sino todo lo contrario, y llevar carrito de bebé o silla complica hacer turismo.
- Visita Lisboa en una fecha que no coincida con fiesta o puentes nacionales, de lo contrario, la masificación hará que no disfrutes de la ciudad como te gustaría.
- El pan en los bares suele ser de calidad y está muy rico.
- En muchos de los bares o restaurantes se comparte mesa con otras personas, sobre todo si se trata de locales pequeños.
Cuando viajo, intento vivir experiencias en todos los sentidos y la gastronomía tiene mucho que ver en esto, es una parte importante en cada uno de mis viajes. Infórmate bien de los platos y productos típicos del lugar que vas a visitar y descubre sabores nuevos o formas distintas de elaborar un plato, relaciónate con la gente, haz lo que hace un local.
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