Parece complicado hablar de los mejores restaurantes de Sevilla porque aunque la oferta es extensa, no todos los restaurantes reúnen los requisitos para salir de él satisfecho al 100%. Créeme que para hacer este post he tenido muy clara mi selección y te prometo que no te van a defraudar. La comida que ofrecen cada uno de ellos es diferente, así tienes distintas opciones para elegir en función de tus gustos.
El orden es aleatorio, no significa que el primero del que te hablo sea mi favorito.
LOS MEJORES RESTAURANTES DE SEVILLA
Restaurante Abantal
Sobre este restaurante hice un post porque lo merecía, ahí podéis ver fotos de todos los platos y detalles de cómo fue la comida. Tiene una estrella michelín, a pesar de esto, el precio por persona es bastante asequible, perfecto para hacer un regalo gastronómico a alguien especial porque lo va a disfrutar muchísimo y os aseguro que le encantará. Como te decía en el post sobre Abantal, el trato fue impecable, la comida realmente deliciosa y la presentación de los platos sublime. Lee el post pinchando aquí: Restaurante Abantal
Restaurante japonés IKI
A este restaurante te recomiendo vayas a comer piezas, están realmente deliciosas, bien elaboradas y con ingredientes de primera calidad. Una cosa curiosa que me ocurre cuando voy a comer a un japonés, a no ser que sea de los mejores restaurantes de Sevilla como es éste, es que no pido nada que tenga atún. Es el ingrediente que más destaca si el restaurante no es de categoría superior. Aquí pidas lo que pidas te encantará, es cierto que nos recomendaron la ensalada de langosta y no me sorprendió en absoluto. Te cuento todos los detalles en este post: Restaurante japonés IKI
La Cochera del Abuelo
Está situado en C/ Álvaro de Bazán, 2. Cuando entras en parte sorprende la decoración que va acorde con el nombre del restaurante, pero no es la tendencia con la que decoran los restaurantes últimamente. El local es pequeño pero las mesas están lo suficientemente separadas para tener intimidad mientras comes o cenas.
Todo lo que se ve en mesa está muy cuidado: la mantelería muy especial, la vajilla maravillosa, los cubiertos dorados…
La carta no es extensa, como detalle te diría que cuenta con platos más propios de tomar en la comida que en la cena, aunque las cantidades no son muy grandes. La comida está hecha a fuego lento, con cariño, eligiendo con sentido cada ingrediente para que al mezclarlos, el resultado sea de 10, un disfrute total y absoluto.
Cuando llegas te ofrecen como degustación una mantequilla hecha allí mismo con pan artesano, bien horneado, tierno a la vez que crujiente, que la acompaña a las mil maravillas. Puedes pedir extra de mantequilla si lo deseas, la tienen en la carta. No te vayas sin tomar de postre la tarta de queso, de las más ricas que he probado hasta el momento y te digo que han sido muchas.
El servicio es excelente, te atienden de forma educada, correcta, tienen muy en cuenta los tiempos entre plato y plato, cambian la vajilla y los cubiertos constantemente (lo podéis apreciar en las fotos)…
Cómo inciso deciros, que antes de traer a la mesa el cordero, el mismo cocinero salió de la cocina, se acercó a nuestra mesa, nos saludó y nos dijo que la pieza de cordero que le quedaba era pequeña, que nos la iban a cobrar a un precio más económico y que también nos informaba por si nos apetecía pedir algo más. Un gesto de agradecer.
Éste ha sido mi último descubrimiento y sin lugar a dudas es de los mejores restaurantes de Sevilla